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domingo, 8 de febrero de 2009

METEOROLOGÍA -Una ciencia inexacta-

Por Hernán Barrios
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..........Por no decir una ciencia de mierda, claro. Pero, ¿dónde se ha visto porquería semejante? Es más, si fuera por mí, la hacía desaparecer de la categoría ciencia como primera medida; y como segunda, y donde me apuren un poco, ni como hobby la dejo. Y de yapa, a esos remontadores de cometas frustrados que estudiaron 3 nubes, 2 vientos y un chaparrón, que se creen Dios y se hacen llamar meteorólogos, los invito cordialmente y con el mayor de los respetos, a irse redondamente a la mierda.

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..........Esteeee… perdón por el exabrupto estimados Serrucheros; no soy yo cuando me transformo. Lo que pasa es que este tema de la meteorología me viene complicando la vida desde chico. Ya en la escuela recuerdo haberme comido más de una cargada de mis compañeros, por culpa del meteorólogo de turno. Allá volvía yo con mi paraguas negro, de aquellos que tenían como 3 metros 80 de diámetro y 1,20 de mango, bajo un sol que rajaba la tierra y con le mirada de los transeúntes perforándome la nuca. “Mirá el nene qué bobito”- decían para sus adentros, al verme pasar con semejante socotroco. Estoy convencido que el temita del paraguas colaboró, al menos en parte, a que en la adolescencia mi autoestima se diera unos cuántos revolcones contra el suelo. De más grandecito superé en parte el tema, pero igual me quedó una especia de fobia hacia el invento de porquería ese, que me acompaña hasta hoy.

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..........Pero el verdadero odio, rabia, e ira compulsiva hacia la meteorología, y sobre todo hacia los señores que aparecen en la tele pronosticando el clima, comenzó a manifestarse en todo su esplendor allá por el 2005, a raíz del temporal que azotó Montevideo sin dejar árbol en pié, y el cual ninguno de los mencionados eruditos fue capaz de anticipar. Me agarró a eso de las 11 de la noche en la calle, en bicicleta y a medio camino entre la UTU y mi casa. Fue una experiencia terroríficamente inolvidable; el viento me llevaba zigzagueando de un lado a otro de la calzada como si fuera borracho, hasta que al fin conseguía tirarme al piso. Ya no tengo muy claro si lo viví o lo soñé, pero conservo la sensación de haber pasado expreso por sobre la terminal de Tres Cruces, montado en mi bicicleta alada, al mejor estilo Papá Noel es su trineo. En el camino, un panorama catastrófico: árboles caídos, cables en el piso, autos aplastados, columnas de iluminación dobladas, luces apagadas y carteles rotos. Pero lo peor de todo, fue que al llegar a mi casa y prender la tele, me encontré con el mismo tipo que temprano a la mañana me dijo, “cielo claro, vientos del sur a 18 kmts. la hora, visibilidad toda la vuelta a la tierra”-, diciendo, “se están registrando fuertes lluvias en la capital del país, con ráfagas de viento que superan los 150 kmts. la hora…”-. Mmm...… ¿qué te parece si te vas un ratito a la p…?

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..........Lo más patético que puede verse en el noticiero –entre otras cosas-, es ver a un tipo diciendo cómo está el clima en ese momento. ¿Pero qué se piensan, que uno vive en un búnker a 30 metros bajo tierra? Si quiero saber si llueve o hay sol, saco el cogote pa fuera y listo. ¡Lo que necesito es saber cómo va a estar después, hermano!! ¿Tan difícil es? No te estoy pidiendo que me adivines los números que van a salir en la lotería de fin de año, solo si va a llover o va a haber sol en las próximas 8 horas. Sol o lluvia. Lluvia moja, sol seca. Splash…¿cazas? La vieja Ema, dueña de una pensión en la que viví en épocas difíciles, me pronosticaba mal tiempo con 72 horas de anticipación y 97% de acierto, solo con el dolor de sus articulaciones cangüecas; y vos con una estación meteorológica en cada esquina, computadores, satélites, detectores sísmicos, telescopios de radio, el viejo Hubble con lentes nuevos y la mar en coche, no me sabes decir si llevo paraguas o gorrito pal sol. Una cagada tu profesión loco; ponete una herrería y fabricá veletas con forma de gallo que seguro nos va a ir mejor a todos.

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..........Supongo que este problemita del “yerro climático” debe darse, en mayor o menor medida en todas partes, pero acá en Uruguay hemos llegado a extremos asombrosos. Hay 3 canales privados de aire y cada uno ostenta cual trofeo, su meteorólogo estrella -por decirlo de alguna manera- y entre ellos compiten a muerte, por ver cual alcanza mayor grado de ridiculez. En el canal 12 tenemos al amigo Rami, quien es el tipo más igualito a Súper Mario Bros que conozco. En el 4 está Nubel Cisneros, monumento viviente a la desgraciadez. Nubel… bue, ya con ese nombre no debería aparecer en ningún medio de comunicación, pero de hecho lo hace. Con 8 pelos moribundos que atraviesan su lustrosa pelada de este a oeste en vergonzosa cruzada, Nubel es acartonado, metódico, predecible, repetitivo, estático, inexpresivo, duro, y de aspecto asquerosamente bonachón. Ah, y para colmo, tiene menos onda que pelo lacio. Su pronóstico del tiempo parece un anuncio de inmolación de un miembro de Al-Qaeda, con chaleco de bombas y detonador incluido. Lastimoso. Pero la verdadera joyita, el Uno, el que monta el número circense más patético y conmovedor, es el amigo Diego Vázquez Melo; Dieguito para los amigos (entre los cuales no me encuentro, claro), o El Viejo Pingüinezco para el resto de la sociedad. Es algo… es una cosa… es, es… mejor véanlo con sus propios ojos, porque no encuentro palabras.

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..........¿Y, qué me dicen? No exagero nada, ¿verdad? ¿Cómo no me voy a calentar si personajes como éste son los encargados de detectar y comunicar a la población, una alerta meteorológica?

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..........Después del episodio de la tormenta que conté al principio, por un tiempito los aparatos estos se convirtieron en seres humanos normales; claro, tenían “cola de paja” por la cagada que se habían mandado, y no querían arriesgarse a que los lincharan en la vía pública, pero pasadas algunas semanas, volvieron a las monadas de siempre como si tal cosa. Al poco tiempo, anunciaron al unísono y con bombos y platillos, una tormenta de muchos grados en no sé que escala, que por supuesto nunca llegó. “Vientos huracanados y lluvias torrenciales”- dijeron a coro; ¡adivinen qué pasó! Exacto, no se movió una hoja ni voló un panadero en los siguientes seis meses.

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..........Fue a partir de ese momento que comencé a hacer y actuar, de acuerdo exactamente a lo contrario que anunciaban. Los locos decían sol, allá salía yo con el paraguasca; lluvia, bermuda y chancletas; y me empezó a ir mejor en la vida.

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..........Redondeando, les cuento que en realidad este artículo surgió, porque hace algunos días –tres, para ser más exacto- los señores meteorólogos dieron una alerta meteorológica para el jueves de noche, en la cual les faltó decir que se terminaba el mundo. Si señores, el Apocalipsis en forma de viento y agua. Agazapado estaba yo a la hora del desastre; agarrando con ambas manos la perilla de la puerta, la olla de los fideos en la cabeza y un cuchillo de Rambo en la cintura por si, luego de pasado el caos, tenía que combatir alguna horda de saqueadores con intenciones de quitarme lo poco que me quedase. El casco me lo quité ahora a la mañana antes de ponerme a escribir, y de la famosa tormenta, ni una nubecita pasajera.



7 comentarios:

  1. Es verdad, a mi ese temporal del 2005 casi me deja sin cabeza por una chapa que paso volando. Obviamente me encontró en la calle porque como tantos me creí que era una lluviecita nada más. Ahora miro el tiempo en Internet y comparo varias páginas por las dudas. Ah y tengo un paraguas chiquito que se puede esconder en la cartera, y sino, puedo usar la sombrilla como paraguas, ningún problema.

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  2. Me imagino que la impresión causada por esa experiencia terrible, que sin duda pudo haberte costado la vida, te debe acompañar y te debe despertar en más de una noche... La falta de seriedad fue total, anunciando tormentas y terremotos a diestra y siniestra luego... por eso prefiero no hacer pro-nó-sticos y ser pro-sí-stico... en fin!

    Iani

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  3. // Bienvenida nuevamente querida Lu, mi lectora número uno, no por interés sino por proximidad. Yo ahora no tengo paraguas (ni chiquito ni grande), tampoco bicicleta y mucho menos cartera. Y sobre la sombrilla, si querés cuelgo una fotito que tengo por ahí a modo de documento. jaja

    // Un tipo como vos no me deja mentir Iani. ¿Verdad que exagero muy poco cuando digo lo que digo sobre el temporal del 2005? Si no calculo mal, vos aún andabas por estas tierras ese año.

    Lamento mucho el problemita de próstata que te aqueja. Abrazo.

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  4. Totalmente de acuerdo con las tomadas de pelo que suelen hacernos estos personajes circenses. Y yo me pregunto: ¿quizá el hecho de pasarse la vida mirando para arriba, entre nubes y estrellas los haga sentirse que son una suerte de personajes de -Viaje a las Estrellas- ó algo por el estilo? o si no, ¿cómo se explica que el "señor pingüinezco" pueda llegar a disfrazarse o a expresarse tan incoherentemente? A los señores directivos de los canales de TV abierta: un poco de seriedad, por favor.

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  5. Muy bueno!!! El fragmento q mas sonrisas me sacó fué la descripción d su peripecia durante el temporal del 2005 q, como a casi todos, lo sorprendió en la calle.
    Ya q estoy aprovecho para consultarle si no hay posibilidad d incluir algún otro tema, xq no es q no me guste, solo q escucharlo una y otra vez aburre un poco....Y si era a propósito, para q nos aprendiéramos la letra, le aviso q ya logró su objetivo, al menos conmigo. Es tan triste la noche q tu can...(perdón, se me mezcló)así q me despido hasta la próxima, bsss

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  6. LO LOGRÉEEEEEEEE!!!!!!!!!!!!! Pude publicar un comentario x mi misma!!!!!

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  7. ¿Vió que no era tan difícil? La felicito por el logro. Y yá me pongo a renovar la discoteca.

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Diga sin miedo lo que piensa, acá no hay censura de ninguna clase. Le sugiero igual que impere el respeto, en caso contrario difícil que pase.