![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihKF40Ys4kqWBgLI6rNJpN_rEWQqysp1hPNgDOAhyWUUxhYMnLc6qspmQmhJ0w8iAKe7aiKOgWFG4nJ7A_a3xE-_fN5P037H3ZsTyLULt8GchJg08m8fr87XfCm2Ztkwlh5qZvbk8CuCc/s200/navidad-gorro.png)
LO LINDO DE LA VIDA ES LA SORPRESA. EL NO SABER QUE ES LO QUE VIENE, ES LO QUE LA HACE MERECEDORA DE SER VIVIDA. DE OTRA MANERA, NO TENDRÍA SENTIDO. O MEJOR DICHO, TENDRÍA UN RECORRIDO UNIDIRECCIONAL DEL CUAL NO PODRÍAMOS ESCAPAR, Y AL CUAL DEBERÍAMOS DE ATENERNOS CUALQUIERA FUERA ESTE, Y CUALQUIERA FUERA SU FINAL.
EN ESTE CONTEXTO, LA VIDA ME HA REGALADO LA POSIBILIDAD DE CONOCER A UNA PERSONITA, QUE NO SOLO SE HA COMPRADO VARIAS PARCELAS DENTRO DE MI CORAZÓN, SINO QUE CASI SIN HABLAR, ME HA ENSEÑADO MUCHO.
LES PRESENTO A VICTORIA, LA MAS LINDA DE TODAS.
Victoria es morocha, bajita y algo rellenita. Cumplió 15 años no hace mucho, hubo fiesta y tuve el honor de ser invitado. Es simpática, extrovertida y muy, pero muy cariñosa. Si prestan atención a su fotografía, notaran que esta delata la presencia de una irregularidad. Si, algún desajuste en su cadena genética hizo que naciera padeciendo SÍNDROME DE DOWN. Digo padeciendo, para ajustarme al lenguaje de la calle, pero en realidad, tengo muchas ganas de decir que ha sido bendecida con el síndrome de Down. Les cuento por que.
Debo decir que antes de conocerla, y ante la inminencia de este hecho, estaba algo inquieto. O mas bien preocupado conmigo mismo, porque no estaba seguro de poder manejar la situación con naturalidad, ya que nunca había tenido contacto directo con una persona Down. Bueno, les cuento que cinco minutos después de conocernos, ya eramos amigos de toda la vida. Suena extraño, pero fue así. Jamas conocí persona alguna que tuviera tal poder de... inclusión emocional. Se hace querer con una mirada. A la segunda, ya te dan ganas de abrazarla y de apretarle esos cachetes regordetes que tiene. Es maravillosa. Uds. dirán que soy yo; que justo me encontró en un momento medio maricón de fragilidad emocional, y me pasaron todas estas cosas. Y yo también lo creí así al principio. Pero con el tiempo vi que a otras personas les pasaba igual. Y me convencí. Era ella, no yo.
A esta altura, y después de haber tenido largas charlas y ardorosos debates conmigo mismo, he concluido que lo que la vida le ha negado en capacidad intelectual, se lo ha recompensado con creces en capacidad emocional. Tanto es así, que aveces siento algo así como una especie de envidia de no poder sentir tan a pecho lleno como lo hace ella. De que mis emociones siempre estén contaminadas con productos emanados de la razón tales como miedo, inseguridad, preconceptos, cálculos de probabilidades, conductas aprendidas, mecanismos de defensa, y otros. En ella eso no existe. Sus sentimientos son absolutamente puros y cristalinos. Así como nacen, salen al exterior. Nada de tabues, nada de filtros sociales. Diganme si esto no es digno de ser envidiado. Ven, envidia que ella tampoco conoce. Esto no implica que no sepa lo que es el dolor, el sufrimiento o el llanto. Si que lo sabe. Y lo demuestra a boca llena. Su tristeza, es pura tristeza. Y su alegría, es pura alegría. Y su alegría es absolutamente contagiosa. Quizás por ser emoción en estado puro, no lo se. Pero basta una sola sonrisa de su boca, para hacerte sentir que vale la pena estar vivo, y entender en un instante, que las cosas por las que nos preocupamos nosotros, "la gente normal", son dignas del mas eximio e ilustre de los estúpidos.
Como les dije anteriormente, participe en carácter de invitado a su fiesta de 15. Nunca vi una sonrisa que disparara una ola expansiva de felicidad tan poderosa como la suya en el momento de entrar al salón. Veías su boca, luego su sonrisa, y ahí sabias que unas milésimas de segundo mas tarde, algo bueno te iba a pasar por arriba y se te iba a meter hasta el alma. Y así pasaba. Era imposible no emocionarse. Hasta el mas duro de los corazones era convertido en gelatina con el poder de su sonrisa. Era una sonrisa que emanaba alegría primero que nada, pero que era acompañada y sustentada por sentimientos tales como agradecimiento, piedad, calma, paz, bondad y sobre todo mucho, pero mucho amor.
Bueno, la cosa es que luego de vivir experiencias como estas, no me quedo otra alternativa que refleccionar sobre algunas cuestiones y replantearme algunas otras. Y por supuesto, luego de esto, compartirlo con Uds., mis queridos amigos. Creo que es bueno y sano que cada tanto nos preguntemos cosa como estas. ¿En que estamos gastando cada minuto de nuestras vidas? ¿Somos felices? ¿Hacemos cosas para ser felices? ¿Somos auténticos? Nuestras preocupaciones, ¿son realmente cuestiones fundamentales, o nos han hecho creer a través de la historia que si lo son? ¿Disfrutamos de la vida? O nos preocupamos demasiado por un futuro que siempre va a estar un paso adelante y no vivimos a pleno el presente. ¿Valoramos realmente lo que tenemos, o gastamos demasiada energía en anhelar lo que desearíamos tener? ¿Damos realmente a nuestros afectos el valor que tienen? ¿Le decimos a las personas que queremos, que las queremos?
No todos tenemos la suerte de ser como Victoria. Pero quizás, tan solo quizás, con un poco de esfuerzo y mucha constancia, podamos llegar algún día a vivir la vida a pleno. A dar sin recibir. A amar gratis. A sonreír porque si. A aceptar a todos sin mas. Y por que no, a bajarle los humos a la razón, que tanto daño le han hecho a la humanidad, y subírselos a la emoción, que tan relegada ha estado siempre.
¡¡¡ FELICES FIESTAS PARA TODOS !!!